La explotación sexual infantil en Pakistán es una realidad, una triste y desagradable realidad. El ser Pakistán un país con unos ingresos muy bajos, muchas personas no tienen recursos y sabiendo de la necesidad de comer, desde hace tiempo explotan a sus hijos, dejando que tengan relaciones con otras personas que pagan por ello. Esta situación debe ser detenida inmediatamente, aunque no es nada fácil controlar esta explotación, que no debe permitirse bajo ningún concepto.
El dinero que gana un menor por tener relaciones con otras personas puede triplicar a lo que una persona adulta consigue, por lo que es una de las razones por lo que los menores son explotados de una manera salvaje, dejando al niño o niña sin infancia y exponiendo a su propio hijo a enfermedades y demás peligros. Esta situación parecía que era sólo de países como Camboya o Tailandia, pero vemos que en Pakistán es una realidad.
Cualquier tipo de explotación sexual debe ser paralizada, pero mucho más la explotación infantil, porque de seguro que estos niños no tendrán un futuro muy esperanzador y estarán marcados para siempre. Es repudiable que sus propias familias lo exploten para poder conseguir dinero. También es lamentable que existan personas que paguen por estar con menores. Todos ellos deberían ir a la cárcel directamente.