Una de las cosas que no ha cambiado en Pakistán, además de seguir siendo un país conflictivo, es que la mujer sigue y seguirá siendo considerada como un objeto, como una persona de segunda clase. Aquí las mujeres no tienen la atención necesaria, ni derechos. Es ciertamente preocupante lo que la mujer representa en la sociedad de este país: NADA.
En temas sanitarios se puede ver un claro ejemplo de que la mujer no es considerada como una persona importante, ya que cuando necesita atenciones médicas como por ejemplo ocurre en un parto, no suele ser atendida por médicos y con un poco de suerte hay alguna persona que conoce algo de medicina que la puede ayudar. No son pocos los casos en que los niños de estas mujeres nacen muertos.
En Pakistán no importan que el niño nazca muerto o que la mujer pueda presentar secuelas de por vida,ya que lo que importa es que el hombre esté bien. Esta machismo en grado máximo que existe en Pakistán da en algunos casos hasta vergüenza ajena, ya que una cultura como la pakistaní es un mal ejemplo para otras sociedades más desarrolladas.